El momento más mágico del año

¿Ya estamos en noviembre?, ¡madre mía como pasa el tiempo!, se me ha pasado el mes de octubre volando y ni me he pasado por aquí para poner fotos y hacer algunas de las entradas que tenía pensado hacer.
Octubre ha sido un mes de murciélagos, ratas, caramelos...en definitiva todo lo que viene a ser Halloween y sus preparativos.
Como el año pasado por culpa de la lluvia no pude hacer nada, este año tenía ganas de hacer muchas cosas. Por ese motivo en cuanto terminaron los verdiales me puse manos a la obra para preparar las cositas que tenía en mente para decorar la calle y mi disfraz.

Para la decoración de este año necesitaba ratas y sobre todo muchos murciélagos. Como tenía varias cajas de cartón para tirar las aproveché para pintar en ellas "las criaturas" que necesitaba.

 Dibujé las siluetas y después puse a mi sobrino a pintarlas con temperas. Pasó una mañana de lo más entretenido. :-)

(estas ratillas no son de este año pero me encantan y tenía que ponerlas)

Al tiempo que hacía la decoración también me lié ha hacer mi disfraz, bueno, más bien parte del disfraz que iba a ser un super sombrero de bruja.

(pequeño boceto de como iba a ser)

Quería hacer un sombrero parecido al de la primera foto de esta entrada ya que ese era de mi sobrina y no me lo podía poner porque me quedaba un poco pequeño.

Para hacerlo tomé como modelo ese sombrero y a partir de este empecé a hacer mi propio patrón.

La segunda parte del disfraz era lo más fácil. En una tienda encontré una camiseta de lo más brujeril que lo mismo te sirve para Halloween que para el resto del año.

Las demás cosas prácticamente las tenía: Una falda, botines, unas medias a juego y las arañas de la foto para ponerlas por toda la pierna. Esto último lo vi en pinterest y me encantó.

(algunas chorradillas halloweeneras que compré)

Con el disfraz casi listo (el sombrero lo iba haciendo poquito a poco), la decoración, tocaba ponerse manos a la obra con las calabazas que dejé para un día antes con la intención de que duraran el mayor tiempo posible.

Este año tenía 3 calabazas para tallar y una libretilla que compré en el Tiger con varias plantillas.

Como mis calabazas eran de esas de supermercado que se venden en estas fechas para carvar, no eran muy grandes con lo cual tuve que adaptar las plantillas un poco ya que estas eran un poco grandes.
Igualmente quedaron bien.

Llegó el día y decoré la calle pero no como tenía pensado. Simplemente cogí los murciélagos, las ratas, las calabazas y las velas y las puse desperdigadas por la fachada de casa.

No me dio tiempo de terminar el  sombrero :_( , me faltó ponerle los alambres para darle forma y que no se deformara.
Aún así pude hacer un apaño y conseguí ponérmelo. Y que bonito quedaba, no me quiero ni imaginar como será cuando lo acabe.

Hizo una noche buenísima y se pasaron tantos niños al truco o trato que me quedé sin caramelos.

Y no solo niños "mostruo" se pasearon por la calle, cuando me fui a dar  cuenta una de las calabazas estaba llena de caracoles.
Hasta aquí mi "crónica Halloweenera de este año". Para el próximo más caramelos, sombrero terminado y sorpresas.
Os dejo con Salem que estuvo pendiente de todo mientras decoraba y ya si eso os lo presento otro día.